Ramón Fernández-Pacheco se ha comprometido a apoyar la reivindicación de esta y otras tres AMPAS de centros educativos que se sienten en “desventaja” ante el proceso de licitación abierto por la Consejería de Educación
02/05/2018 La Asociación de Padres y Madres (AMPA) ‘Rafael Florido’ del CEIP Francisco de Goya ha pedido amparo al alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco, ante el temor de que la Junta de Andalucía le rescinda el contrato de gestión del comedor escolar y que lo adjudique a una gran empresa “en detrimento de la calidad de la alimentación de los niños” y motivada “únicamente por un factor economicista”.
La situación en la que se encuentra el AMPA del Francisco de Goya es similar a la de los centros Santa Isabel, la Chanca y Europa, que son los únicos cuatro que, a día de hoy, mantienen comedor propio, después de los últimos procesos de licitación abiertos por la Junta de Andalucía y que, entienden, están pensados para que sean las grandes empresas de catering las que puedan cumplir con los diferentes requisitos que solicitan.
Acompañados por representantes de Fapace y Codapa, las representantes del AMPA del CEIP Francisco de Goya han expuesto al alcalde la situación de “desamparo” en la que se encuentran cuando su “única pretensión” es mantener “la calidad de la comida”, fomentar una “dieta saludable” y propiciar “la economía local” con la adquisición “de productos cercanos, de calidad y ecológicos”. Así lo ha indicado su presidenta, Mireia García, que pide al alcalde de la ciudad un apoyo expreso del Ayuntamiento a las familias “que no ganan nada con el comedor, salvo ofrecer lo mejor a los niños”.
Apoyo del Equipo de Gobierno
El alcalde se ha comprometido a respaldar su postura, que defenderán las AMPAS mañana viernes día 4 en concentraciones ante las puertas de los colegios afectados, y a plantear, incluso, una moción de apoyo. Entiende Fernández-Pacheco, que los padres y madres forman parte de la comunidad educativa y que, en el caso de estas asociaciones almerienses, se ven perjudicadas por un proceso de licitación que, entre otras cosas, obliga a presentar documentación en el Registro de la Agencia Pública Andaluza, con sede en Sevilla, y a ceder a la empresa adjudicataria el equipamiento del comedor. Incluso si ese equipamiento es propiedad del AMPA, como ocurre en el caso del CEIP Francisco de Goya.
El Ayuntamiento de Almería ya defendió en 2016 una moción en sesión plenaria cuando los colegios afectados por una licitación similar eran siete. Hoy, dos años después, solo quedan cuatro colegios con comedor propio y, al parecer, perderían ese contrato con las novedades introducidas por la Junta y que, según plantean desde el AMPA, son “claramente beneficiosas para las grandes empresas y difícilmente asumibles por unas asociaciones de padres y madres que buscan un beneficio económico igual a cero”.